Mesa redonda hispano-marroquí (o qué hacer por la tarde el Día de la Diversión Laboral)

«La inmigración en Andalucía: Desde la realidad hasta la gestión administrativa»

Martes 1 de abril de 2008, a partir de las 17:30 en la sede de la Plataforma del Voluntariado, situada en calle nueva, n° 13, 2ª planta (paralela a calle Larios).

En la mesa redonda participarán representantes de las siguientes entidades: MPDL-Málaga, Málaga Acoge, Asociación Marroquí para la Integración de los Inmigrantes, Seminario Interdisciplinar de Estudios sobre la Inmigración, así como el señor Coordinador Provincial de Políticas Migratorias de la Junta de Andalucía y la Directora Técnica del Área de Participación, Inmigración y Cooperación al Desarrollo del Ayuntamiento de Málaga. La jornada contará con la asistencia de 18 invitados de honor; 15 investigadores de Estados Unidos y 3 profesores universitarios marroquíes que vienen para conocer la realidad de la inmigración en Andalucía. Como es habitual en los encuentros que organizamos, el debate llevará la mitad del tiempo de la mesa redonda.
(La mesa redonda se organiza en colaboración con: Área de Participación Ciudadana, Inmigración y Cooperación al desarrollo del Ayuntamiento de Málaga, Consejería para la Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía-Málaga, Consejería de Gobernación-Málaga).

ANUNCIO DE Ahmed Khalifa, Presidente de la Asociación Marroquí para la Integración de los Inmigrantes
www.asociacionmarroqui.com Aula B.4.10, E.T.S.I. Informática Campus de Teatinos, Universidad de Málaga

La resaca del cambio horario en España (o sobre los ritmos circadianos)

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Esta mañana debió sonar el despertador a las 7:00 am, y seguro que sonó, pero dormido lo apagué. A los 7:10 am la jugada se repitió. A las 7:20 también, si el manual del despertador no me engaña… a las 7:30 am me desperté y lo apagué…¿Por qué me ha costado despertarme esta mañana? El cambio horario en España quizás tenga la culpa. ¿O son los ritmos circadianos? En biología, los ritmos circadianos son fenómenos biológicos que se repiten en intervalos regulares de tiempo. Todos nosotros los sufrimos en nuestra propias carnes, todos los días, pero sólo los notamos días como hoy, por el cambio horario, o cuando retornamos de un largo viaje en avión.

El cambio horario (atraso o adelanto de una hora) es utilizado en una cuarta parte de los países de todo el mundo como medida de ahorro energético ya que permite aprovechar mejor la iluminación diurna. ¿Pero realmente afecta a nuestros «relojes» circadianos? Sí, según el estudio presentado en el artículo Thomas Kantermann, Myriam Juda, Martha Merrow and Till Roenneberg, «The Human Circadian Clock’s Seasonal Adjustment Is Disrupted by Daylight Saving Time,» Current Biology, Volume 17, Issue 22, Pages 1996-2000, 20 November 2007. El estudio de Roenneberg, que le dará a la cerveza porque es de Munich, realizado con 55 mil personas, encontró que (si no usamos despertador) las horas de acostarse y levantarse están correlacionadas linealmente con las horas de ocaso y amanecer del Sol (estas horas cambian según la Tierra rota alrededor del Sol durante el año), pero no lo están con las horas «legales» impuestas por convenio social.

Lo más intersante de estudio es la parte que involucra a 50 personas, a quienes estudiaron durante las 8 semanas alrededor de las fechas del cambio horario (en primavera y otoño) durante dos años consecutivos, mostrando que su ciclo circadiano no se ajustó (no se adaptó) correctamente ha dicho cambio horario en primavera aunque sí en otoño. Lo mismo pasa con el «jet lag» que se sufre menos cuando cruzamos el «charco» hacia América que cuando retornamos a Europa.

Los resultados de estos estudios dependen de la persona (a algunos nos afecta más y otros les afecta menos). Además, a algunos nos afecta más por la mañana y a otros por la noche. Estos estudios se basan en un atributo psicométrico llamado cronotipo que se refiere al hecho de que algunos reaccioamos mejor (y preferimos) las horas matutinas y otros las vespertinas, como estudió Kleitman en su libro sobre el sueño «Sleep and Wakefulness,» 1939 (revisado en 1963). Se ha introducido el llamado Índice Cronotípico Matutino-Vespertino («Lark-Owl Chronotype Indicator«, LOCI) de Roberts (1999). Como el índice LOCI varía de una persona a otro, el efecto del cambio horario depende nuestro valor LOCI. En general, el índice matutino se adapta mejor al cambio horario que el vespertino por lo que es de esperar que esta noche estemos más cansados que de costumbre.

La biología molecular de los ritmos circadianos será tema para un próxima entrada… muy interesante por cierto.

Disfruta en el trabajo con PicBreeder justo el día antes (o la evolución genética de gráficos en acción)

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Picbreeder: Collaborative Interactive Art Evolution (Genetic Art)
Kenneth O. Stanley (c) 2007 University of Central Florida

Kenneth O. Stanley y colaboradores han desarrollado un programa Java interactivo que nos permite hacer evolucionar una imagen utilizando algoritmos genéticos permitiendo alcanzar imágenes sugestivas de gran atractivo. Si te atreves, hoy que estarás con mal cuerpo por el cambio horario (aquí en España), podrás sonreir un rato a la espera de mañana, Día Internacional de la Diversión Laboral. La internet ayudará a que la UNESCO cumpla su objetivo mañana, sin lugar a dudas, en el primer mundo. Al menos hasta que las iniciativas OLPC (one laptop per children de Nicholas Negroponte, MIT) o el Intel ClassmatePC permitan que el tercer mundo también pueda disfrutar de la diversión laboral en internet.

El último en descubrir el teléfono fue Bell (o «el último de la fila» acaba siendo el primero)

«Los burros» fue el origen de «El último de la fila», quienes popularizaron a Quimi Portet. Igualmente, el invento de Antonio Meucci fue el origen del invento de Bell, quien popularizó lo que ahora llamamos teléfono. Como nos cuenta Jürgen Schmidhuber, «The Last Inventor of the Telephone,» Science Vol. 319. no. 5871, p. 1759, 28 March 2008, en su comentario sobre la crítica al libro «The Telephone Gambit» de Seth Shulman, escrita por D. L. Morton Jr., «Tilting at a Myth,» Science Vol. 319. no. 5867, p. 1188, 29 February 2008. El susodicho libro trata sobre la disputa por la prioridad del descubrimiento entre Alexander Graham Bell y Elisha Gray, pero ninguno de ellos fue realmente el inventor. Los franceses dicen que el inventor fue Charles Bourseul, en 1854, por su concepción teórica del invento. Los italianos consideran a Antonio Meucci como el «padre» del invento, ya que tenía un teléfono «operativo» en 1857 (y así lo afirmó el Congreso Americano en 2002). Los alemanes consideran a Phillipp Reis como inventor del teléfono eléctrico en 1860. Comparados con estos pioneros, Bell y Gray llegaron bastante tarde (al menos tres lustros tarde).

Los escoceses consideran a Bell el «padre de la criatura» (patentó su invento en 1876), así considerado también en EEUU y Canadá. Lo que realmente hizo Bell fue comercializar y popularizar el invento creando una compañía telefónica que tuvo tanta influencia que modeló la opinión de los «masas» haciéndoles «creer» que era el gran inventor.

¿Qué nos muestra esta anécdota? Muchos inventos (y descubrimientos) ocurren simultáneamente en lugares muy alejados del globo, posiblemente sin conexión directa entre ellos, pero los que pasan a la historia como «padres» de la criatura, al menos para el «gran público», son los que logran el éxito. Al menos en la cultura popular, el crédito siempre lo recibe el que ha tenido el éxito, el último de la fila, el último que contribuyó al invento olvidando las ideas originales, a los pioneros (a los «burros»).

Colón no se hizo famoso porque fue el primero en descubrir América, sino porque fue el último.

Bill Gates no se hizo famoso porque fue el primero en inventar «windows», sino porque fue el último.

El análisis estadístico de «La Tumba Perdida de Jesús» en Discovery Channel aceptado como artículo de investigación en Annals of Statistics (pero no sin discusión, claro)

En el Documental de Discovery Channel sobre «La tumba perdida de Jesús», el matemático Andrey Feuerverger afirmaba: “las posibilidades de que sea la tumba (contiene 6 nombres concretos juntos) son de 1 en 600, en el peor caso, y de 1 en un millón, en media.» Este análisis estadístico, muy criticado, se envió a una revista internacional como artículo y permaneció en «secreto» durante el proceso de revisión. Los revisores no han encontrado «fallos» en el mismo, con lo que el artículo acaba de ser aceptado (no sin discusión). El análisis estadístico es científicamente correcto. Aunque puede que la tumba sea un fraude por otras razones.

Aquí tenéis el enlace al comentario del Editor, el artículo, varios artículos que lo discuten (algunos a favor y otros en contra) y finalmente la respuesta del propio autor. Si os gusta la estadística y sabéis inglés, son de lectura recomendada. En otro caso, lo siento, no pienso traducir tanto material. Mi opinión personal es «la del pollo», entre dos amigos se comieron un pollo, pero sólo uno disfrutó, el otro se quedó mirando. Estadísticamente, cada uno comió la mitad.

Editorial: Statistics and «The Lost Tomb of Jesus» Stephen E Fienberg
Statistical Analysis of an Archeological Find Andrey Feuerverger
Discussion of: Statistical Analysis of an Archeological Find Stephen Stigler
Discussion of: Statistical Analysis of an Archeological Find—A Bayesian View Joseph B. Kadane
Discussion of: Statistical Analysis of an Archeological Find Holger Hoefling and Larry Wasserman
Discussion of «Statistical Analysis of an Archeological Find» Camil Fuchs
Discussion of «Statistical Analysis of an Archeological Find» Don Bentley
Discussion of «Statistical Analysis of an Archeological Find» Julia Mortera and Paola Vicard
Discussion of: «Statistical Analysis of an Archaeological Find» Randall Ingermanson
Discussion of: Statistical Analysis of an Archeological Find–Skeptical counting challenges to an archaeological find Sheila Macdonald Bird
Response to Discussants: Statistical Analysis of an Archeological Find

PREMIO ABEL concedido a la teoría de grupos

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El estadounidense John G. Thompson y el francés Jacques Tits han sido distinguidos hoy con el premio Abel, considerado el Nobel de las matemáticas, por sus logros en el campo de la Teoría de Grupos, campo que podemos afirmar que nació tras el duelo a muerte que acabó con la vida de Evariste Galois, a los 20 años de edad, pero quien la noche anterior al duelo, temiendo lo peor, trató de revolucionar el conocimiento matemático sobre cuándo las raíces de polinomios se pueden expresar utilizando operaciones elementales, cosa que había descubierto pero no publicado, basándose en ciertos grupos de simetría de los polinomios, que se representaban mediante unos objetos matemáticos «curiosos», los grupos resolubles. La teoría de Galois es sin lugar a dudas el nacimiento de la moderna teoría de grupos.

Los trabajos de Thompson y Tits han sido fundamentales para obtener la clasificación de todas las representaciones de grupos finitos, que modelan las transformaciones de simetría discretas (como las de los polígonos simétricos de n lados).

Uno de los grandes logros de Thompson, junto al fallecido Feit (que también merecería el Abel), fue probar el Teorema del Orden Impar, mostrar que muchos grupos de simetría finitos se pueden descomponer en cierto tipo de grupos «primos», igual que la descomposición en números primos de los números naturales. Ello permitió concebir que se podría obtener una clasificación completa de los grupos finitos si se lograban clasificar estos grupos finitos «primos» (una especie de Tabla de los Elementos para los Grupos Finitos). El artículo de Thompson-Feit publicado en 1963 tenía 255 páginas y en aquel momento fue la demostración más larga de un teorema hasta entonces publicada. Además, fue el inicio de una serie de artículos de cientos de páginas para clasificar a los grupos más difíciles, los llamados «monstruos» (grupos «esporádicos», que han de ser estudiados uno a uno). El mayor de ellos, llamado «El Monstruo», culminación del trabajo de Thompson y Tits es un objeto en 26 dimensiones tan intrincado que sólo se puede «ver» bien en un espacio de 196883 dimensiones y que tiene más simetrías internas que átomos hay en el Sol.

Gracias a Thompson y Tits, hoy pensamos que ya se ha completado la clasificación de todos los grupos finitos. Si se escribe dicha clasificación ocupará más de 10000 páginas de desarrollos matemáticos complicados. Quizás la mayor obra de la Matemática en toda la historia.

Si te gusta (o gustó) el cubo de Rubik, para su resolución, «lo más natural» es aplicar la teoría de grupos. Aunque si no la conoces te diviertes más resolviéndolo.

El plástico de nuestras vidas (o sé ecológico y no mires con quién)

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Un estudio del gobierno de los EEUU muestra que la mayoría, tando jóvenes como ancianos, tenemos residuos plásticos (en concreto polímeros de bisfenol-A, BPA) en nuestro cuerpo. El artículo de Janet Raloff, «How Plastic We’ve Become. Our bodies carry residues of kitchen plastics,» Science News, 9 Feb. 2008, se hace eco de estos resultados que nos recuerdan que no sólo estamos rodeados de residuos plásticos por doquier, sino que nuestros alimentos también contienen residuos plásticos. Los plásticos que usamos en el microondas para calentar alimentos muchas veces adquieren «manchas», que no somos capaces de quitar cuando los lavamos. El proceso también ocurre al contrario, nuestros alimentos reciben residuos de polímeros que acaban acumulados en nuestros cuerpos, incapaces de eliminarlos. Estos residuos tienen efectos sobre nuestra salud, que no se conocen en detalle, aunque los estudios realizados con animales de laboratorio (por ejemplo, roedores) muestran que pueden producir obesidad, azúcar, impotencia, etc.

En el nuevo estudio se ha partido de la orina de 2500 norteamericanos y se ha encontrado que en el 92% de los casos  contiene cantidades medibles de polímeros BPA (sólo unas pocas partes por milmillonésima). Por supuesto la Industria del Plástico norteamericana se ha defendido «atacando» el estudio acusándolo de falta de rigor. No han medido la concentración de BPA directamente sino de un residuo derivado que resulta de la excreción de BPA, luego «estrictamente» el estudio está sesgado. Los que han desarrollado el estudio se defienden afirmando que no existen pruebas de que los sujetos del estudio estén expuestos a dicho producto derivada, la única fuente posible, es consumir directamente BPA. La Industria además ha recordado que las cantidades son muy inferiores a las necesarias, según los estudios animales desarrollados en los últimos 15 años, para provocar enfermedades, defectos genéticos, etc. Sin embargo, el estudio afirma lo contrario, que las cantidades necesarias para provocar los residuos observados deben ser unas mil veces mayores (unos 100 microgramos en cada kilogramo del sujeto) y que pueden tener consecuencias.

Hace dos años se publicaron estudios japoneses que mostraban la contaminación en bebés por BPA debidos a los biberones y los recipientes de plástico usados en los microondas para calentar la papilla (Janet Roloff, «What’s Coming Out of Baby’s Bottle?,» Science News, 1999). De hecho los nuevos resultados muestran que los niños mayores concentraciones de BPA que los jóvenes, y estos que los adultos y ancianos. Además, la concentración en hombres un poco mayor que en mujeres. Sorprendentemente, las mujeres embarazadas también muestras niveles más altos que las que no lo están, lo que puede favorecer una gran transferencia de BPA para el feto.

¿Y la causa es el plástico en la comida? Los datos temporales (la hora del día del análisis) muestra claramente que los niveles son mayores después de las horas de las comidas principales del día (horario internacional, no español). La correlación parece que no ofrece dudas.

Debemos ser más ecológicos y evitar compras como éstas (destaco los juguetes y objetos que estén hechos de plástico y puedan ser mordidos por nuestros bebés). La fabricación de los plásticos constituye una fuente muy importante de contaminación (proceden del petróleo) y la mayoría no se pueden reciclar, por lo que debemos de comprobar las etiquetas y consumir sólo los que sean reciclables (como los P.V.C.), aunque recuerda, su reciclado también es un proceso muy contaminante. Hay plásticos llamados «ecológicos» pero son difíciles de encontrar en el mercado. Pero, como algunos afirman, se avecina un futuro negro para los plásticos.

En resumen, la Industria del Plástico (que mueve muchísimo dinero en todo el mundo) dice : ¡¡ Estamos a salvo, no os preocupéis !!  El estudio científico afirma : ¡¡ Cuidado, hay un gran problema !! Por supuesto, estas grandes diferencias en opinión son debidas a que la interpretación de los datos del estudio es difícil. ¿Quién tiene razón? Sólo estudios futuros podrán darnos la respuesta.

Ahh!! Recuerda que si vas al hipermercado, por favor, llévate tus propias bolsas de plástico… que no tengamos que llegar al extremo de los americanos.

Muy interesante el artículo de El País: «Adiós a la bolsa de plástico. ¿Llega la de almidón?»

¿Cómo estudiar para los exámenes? (o como para aprender hay que pasar el mal trago de los exámenes)

¿Cómo estudiar? Buena pregunta, que, como todas las buenas preguntas, tiene múltiples respuestas. El artículo de Jeffrey D. Karpicke and Henry L. Roediger, III, «The Critical Importance of Retrieval for Learning,» Science Vol. 319. no. 5865, pp. 966 – 968, 15 February 2008, trata de buscar una buena respuesta. ¿Cuándo hemos aprendido bien? Cuando el alumno es capaz de obtener la respuesta correcta a una pregunta (superar los exámenes). Los investigadores han estudiado el aprendizaje de palabras de un idioma extranjero mediante cuatro experimentos diferentes. En el primero, los alumnos estudian todo el vocabulario, reciben un examen «aleatorio», vuelven a estudiar todo, vuelven a pasar un examen «aleatorio», etc., (estudia todo y se le pregunta de todo). En  el segundo, cuando un alumno supera una questión en un examen, ya no se le vuelve a preguntar nunca más, pero sí sigue estudiándola (estudia siempre todo pero se le pregunta selectivamente). En el tercero, cuando el alumno supera una cuestión en un examen, ya no la vuelve a estudiar más, pero puede volver a caer en los exámenes (estudia selectivamente pero se le pregunta de todo). Y en el cuarto, cuando el alumno supera una cuestión, ya no se le vuelve a preguntar nunca más ni la vuelve a estudiar (estudio selectivo y exámenes selectivos).

¿Cuáles son los resultados? Volver a estudiar lo ya aprendido no mejora los resultados en los futuros exámenes. Sin embargo, «sufrir» repetidos exámenes de lo mismo sí mejora el recuerdo de lo aprendido. El estudio demuestra la enorme importancia de recordar periódicamente lo aprendido («sufrir» exámenes repetidos) para reforzar los conocimientos (no hay que volver a estudiarlos pero sí hay que sufrir siendo cuestionado sobre ellos). La evaluación continua del conocimiento se muestra como extremadamente eficaz.

En los experimentos, alumnos universitarios han tenido que aprender reiteradamente una lista de 40 pares de palabras, donde una es en swahili y la otra en inglés (por ejemplo, mashua-boat), y sufrir exámenes sobre ellas, en los que se  les pergunta una de las dos palabras y tienen que recordar de memoria la otra (y escribirla correctamente). Los alumnos tras el primer estudio de los 40 pares fueron interrogados sobre cuántos recordarían una semana más tarde (sin conocer cómo se le obligaría a re-estudiar y ser re-examinado, es decir, en cuál de los 4 casos estaba). En media predijeron que recordarían el 50%. Sin embargo, sólo lograron recordar del orden del 21% de los pares.

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Porcentaje de aciertos acumulados en los exámenes (0.8 es nota de 8 sobre 10) en los cuatro casos.

Los resultados muestran que en el aprendizaje es más importante hacer exámenes que estudiar con objeto de lograr un recuerdo a largo plazo de lo estudiado (eso ya lo saben los que preparan oposiciones que buscan a alguien les haga preguntas sobre lo estudiado para recordarlo mejor). Estudiar repetidamente cosas sin recibir exámenes sobre ellas no produce ninguna mejora apreciable en el aprendizaje una semana más tarde. Como muestra la figura los resultados son dramáticos.

Un punto interesante del estudio es que, lo ya aprendido, volverlo a estudiar, no sirve de nada. Si ya lo sabemos por mucho que lo volvamos a estudiar, no vamos a recordarlo mejor. Además, el estudio para indicar que la velocidad con la que olvidamos lo que aprendido no depende de lo rápido que lo aprendiéramos, sino de la práctica (superación de test en este estudio) que hemos hecho de dichos conocimientos. Si no los practicamos, los olvidamos más rápidamente.

A nadie le gusta estudiar, pero menos aún superar exámenes. Sin embargo, esto último es lo mejor para aprender. Por lo que para superar los exámenes de «los otros» hay que realizar tests de auto-evaluación y superar los «nuestros propios».

El blog ¿Cómo Estudiar? puede ser de vuestro interés.

El libro de Ken Bain titulado «Lo que hacen los mejores profesores universitarios» es interesante y tiene ideas para reflexionar y actuar (la web enlazada es un resumen). Os lo recomiendo.

«La buena docencia puede aprenderse».

PS (22 feb. 2010): Os gustará el artículo de Mónica Salomone, «Dormir para ‘vaciar’ el hipocampo … y seguir aprendiendo,» El País, 22 feb. 2010 [visto en Menéame]. Os copio algunos extractos.

«Una noche en vela reduce la capacidad de asimilar conocimientos en casi un 40%», explica el científico Matthew Walker

El sueño es necesario para aprender. El trabajo de Matthew Walker, de la Universidad de California en Berkeley, refuerza la teoría de que el sueño limpia la memoria a corto plazo y deja sitio libre para más información. Los recuerdos de los hechos del día se almacenarían temporalmente en el hipocampo -área identificada hace tiempo como importante en la memoria- para después ser enviados a la corteza prefrontal, que dispone, probablemente, de más capacidad. «Es como si el buzón de correo entrante del hipocampo se llenara, y simplemente no van a entrar mensajes nuevos hasta que se vacíe», dice Walker. «Los recuerdos rebotarán hasta que duermas y los muevas a otra carpeta». La limpieza del buzón del hipocampo tiene lugar sobre todo durante una fase del sueño llamada fase 2 del sueño no-REM. La mitad del tiempo de sueño transcurre en esta fase, explicó Walker, y «no podía creer que la naturaleza dedicara tanto tiempo a algo sin motivo».

El proceso está íntimamente relacionado con el aprendizaje. En uno de sus experimentos más recientes, Walker hizo que 39 jóvenes aprendieran una tarea específica durante un tiempo determinado, a mediodía. Todos tuvieron resultados similares. Pero a las dos de la tarde la mitad de ellos durmió una siesta y la otra mitad no, y de nuevo a las seis se dedicaron a aprender. Esta vez los que no habían dormido tuvieron resultados peores, mientras que los de la siesta mejoraron.

Así que Walker repite un consejo que no sonará nuevo a los estudiantes: pasar la noche despierto estudiando antes del examen no es en absoluto una buena idea. «Una noche sin dormir reduce la capacidad de asimilar conocimientos en casi un 40%»; las regiones cerebrales implicadas «se cierran» durante la falta de sueño.

Conferencias en Málaga (CAC) = Presente y futuro de la ciencia y la tecnología

EL XI CICLO DE CONFERENCIAS “PRESENTE Y FUTURO DE LA CIENCIA YLA TECNOLOGÍA” ABORDARÁ LOS ASPECTOS MÁS RELEVANTES DEL CAMBIO CLIMÁTICO (Para lo poca Cultura Científica Malagueña, hay que aprovechar estas oportunidades) 

El Centro de Arte Contemporáneo de Málaga (CAC) acogerá desde el 1 al 29 de abril la undécima edición del ciclo de conferencias “Presente y Futuro de la Ciencia y la Tecnología”, que en esta ocasión ha elegido el cambio climático como tema princiapal. Además se abordarán temas sobre neurociencia, astrofísica, paleontología, biología molecular y arqueometría. Este ciclo pretende dar a conocer las claves del desarrollo científico y tecnológico, y presentar a la sociedad una visión más asequible de la ciencia. Las conferencias están organizadas por el área de Cultura del Ayuntamiento de Málaga, y cuenta con el patrocinio del ministerio de Educación y Ciencia, la Universidad de Málaga, la Fundación Unicaja, la entidad “2016 Málaga ciudad europea de la cultura” y el Centro de Arte Contemporáneo de Málaga. El ciclo está coordinado por el Laureano Moreno Real, Catedrático de Química Inorgánica de la Universidad de Málaga, junto con Antonio Heredia Bayona, Miguel Ángel García, Mª Ángeles Gómez de
la Torre y Rafaela Pozas.
Todas las conferencias se celebrarán a las 19,30 horas en el CAC (Calle Alemania s/n), salvo la del día 1 de abril que será a las 19,00 horas. La entrada es libre hasta completar aforo (HAY QUE IR TEMPRANO, LAS MÁS INTERESANTES SUELEN LLENARSE TODOS LOS AÑOS).

Programa:

  • 1 abril NEUROCULTURA Dr. Francisco Mora, Catedrático de Fisiología Humana de la Universidad Complutense de Madrid.
  • 3 abril FÓSILES, CULTURA E HISTORIA DE LA VIDA Dr. José Luis Sanz, Catedrático de Paleontología de la Universidad Autónoma de Madrid.
  • 8 abril CAMBIO CLIMÁTICO Y ENFERMEDADES INFECCIOSAS VECTORIALES Dr. Rogelio López-Vélez, Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Ramón y Cajal de Madrid.
  • 10 abril LA ENERGÍA OSCURA CUMPLE DIEZ AÑOS Dra. Licia Verde, Profesora ICREA en el ICE, Instituto de Ciencias del Espacio (IEEC-CSIC, Barcelona) y Visiting Senior Research Scientist, Princeton University, USA.
  • 15 abril QUIMERAS: DEL MITO A LA CIENCIA Dr. Miguel Ángel Medina, Profesor Titular de Bioquímica y Biología Molecular de la UMA.
  • 17 abril EL DESARROLLO SOSTENIBLE EN LA MÁLAGA DEL FUTURO D. Manuel Díaz Guirado, Concejal Delegado de Urbanismo del Ayuntamiento de Málaga.
  • 22 abril ESCENARIOS DE CAMBIO CLIMÁTICO EN ESPAÑA Dr. Manuel Castro Muñoz de Lucas, Catedrático de la Universidad de Castilla-La Mancha.
  • 24 abril ARQUEOMETRÍA Y RAYOS-X: APLICACIONES AL PATRIMONIO HISTÓRICO MALAGUEÑO Dra. Laura León Reina, Laboratorio de Difracción de Rayos-X , Servicios Centrales de Apoyo a la Investigación de la UMA.
  • 29 abril EL OTRO CAMBIO CLIMÁTICO: SEQUÍAS E INUNDACIONES. DOS CARAS DE LA MISMA MONEDA Dr. Millán Millán Muñoz, Director del Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM-Valencia).

¿Es verdad que el campo magnético se invierte periódicamente? ¿Por qué?

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La película «El núcleo» («The Core») de 2003, dirigida por Jon Amiel, nos presenta un escenario apocalíptico debido a que el núcleo interior de la Tierra deja de rotar (en realidad el campo magnético lo genera los movimientos convectivos de la parte externa del núcleo que es «más líquida») por lo que el campo magnético terrestre empiza rápidamente a desaparecer (mueren personas con marcapasos, las palomas migratorias pierden su orientación, ocurren supertormentas eléctricas en Italia, etc.). Claro, como no, el gobierno americano arregla el mundo «otra vez» mandando un supernavío al interior de la Tierra para con una explosión de una bomba nuclear conseguir que el núcleo vuelva a rotar… el absurdo de lo absurdo… «excavar hacia el centro de la Tierra (!) en una nave diseñada especialmente (!!) construida de material indestructible (!!!), llamado Unobtanium».

Muchos amigos me preguntaron entonces si era verdad que el núcleo de la Tierra rotaba y que se invertía su giro y que podía llegar «a pararse», y que … En su momento, años há, cuando aún no existía este blog, traté de contestar a sus preguntas lo mejor que pude… muchos no me entendieron… pero, claro, con unas cervezas en el cuerpo uno explica las cosas de forma «complicada»…

El reciente artículo de divulgación de David Gubbins, «Earth science: Geomagnetic reversals,» Nature 452, 165-167, 13 March 2008, resolverá la mayoría de las dudas de los que todavía duden sobre las inversiones de la polos del campo magnético terrestre (en la figura de arriba tenéis lo que según datos de rocas magnetizadas en estratos de diferente antigüedad han sido las inversiones del campo «más recientes», la última hace unos 800 mil años hacia el estado que ahora llamamos «normal»).

No sólo el campo magnético de la Tierra cambia periódicamente de polaridad, sino también el de Nuestro Sol, que cambia cada 11 años, más o menos. En algunas estrellas estos cambios de la dirección del campo magnético se dan en ciclos mucho más cortos, por ejemplo, J.-F. Donati et al. «Magnetic cycles of the planet-hosting star τ Bootis,» Monthly Notices of the Royal Astronomical Society, Online Early Articles (2008), han encontrado inversiones con un periodo del orden de 1 año en la estrella tau de la constelación del Boyero (en realidad han observado una inversión entre las observaciones en 2006 y en 2007 y suponen que será un fenómeno periódico, que habrá que confirmar en el futuro).

Pero, volviendo al artículo de David Gubbins: ¿Ha tenido siempre la Tierra campo magnético? Sí, al menos durante los últimos 3000 millones de años, siendo siempre dipolar, con un polo norte y un polo sur (excepto durante los «breves» lapsos en los que se ha producido la inversión como tal), igual que un imán. ¿Quién genera este campo magnético? El núcleo exterior de hierro líquido está continuamente en movimiento convectivo, a velocidades promedio de un milímetro por segundo, y cuando corta las líneas de campo magnético genera un voltaje que refuerza el campo magnético original. Claro no todo el núcleo rota como un sólido, porque es líquido. Las diferentes zonas convectivas rotan en sentidos diferentes (horario y antihorario). El sentido «dominante», la suma de todos los horarios y antihorarios no siempre da exactamente cero, todo lo contrario, es el que marca la dirección del campo magnético. Periódicamente las zonas «no dominantes» ganan a las «dominantes» y el campo magnético se invierte. Es un fenómeno no lineal que, aunque no se comprende todavía con todo detalle, se sabe que la convección del núcleo externo líquido es muy inestable.

¿Cómo se sabe que la polaridad del campo magnético terrestre se ha invertido en el pasado? Muchas rocas están magnetizadas en la dirección del campo magnético en el momento de su formación. En columnas sedimentarias se observa que esta magnetización cambia alternativamente conforme vamos profundizando (yendo más lejos en el pasado). También se han observados «tiras» magnéticas en la plataforma oceánica cerca de las dorsales oceánicas donde dos placas tectónicas «colisionan». La «nueva» tierra que emerge en estas dorsales oceánicas queda magnetizada y muestra «tiras» magnéticas alternas en la actualidad. ¿Cuánto dura el proceso de una inversión? «Muy poquito», unos miles de años. El campo se vuelve cada vez más débil hasta que se vuelve cero (pero como es inestable) y vuelve crecer poco a poco, pero invertido.  ¿Cuál es la periodicidad de las inversiones? Los datos geológicos «hablan» de una inversión cada 300 mil años, en media. La última fue hace 780 mil años. Entre inversiones, el campo a veces realiza una «excursión» al «otro lado» retornando al poco tiempo (un aborto de inversión). ¿Tienen algún patrón la inversiones? Los estudios estadísticos parecen indicar que son completamente aleatorias.

Y la pregunta del millón de dólares (digo, euros) ¿Nos estamos acercando a una nueva inversión? Puede que sí. Desde 1850 el campo magnético dipolar sea debilitado alrededor de un 5% por siglo y datos arqueológicos indican que en la época de los romanos, hace 2000 años, era aún más fuerte. Estos pueden ser indicativos del inicio de una inversión, pero pueden que se queden sólo en un «nuevo» aborto de inversión. No se sabe. Ni los experimentos por ordenador, cada día más precisos, ni los experimentos de laboratorio, parece que son lo suficientemente precisos como para permitirnos dar respuesta segura a esta cuestión.

¿Tiene razón la peli «El núcleo» sobre los efectos de una inversión? Un campo magnético más débil puede debilitar el efecto de apantallamiento de la magnetosfera con lo que aumentará la actividad de las auroras (boreales), habrá problemas en las comunicaciones electrónicas, en las redes de distribución de electricidad, pero se sabe muy poco de los detalles y magnitud de estos efectos. Lo que está claro es que la especie humana ha sobrevivido en el pasado múltiples inversiones por lo que no habrá ningún efecto apocalíptico significativo… o esperemos que para entonces, al menos, lo sepamos con mayor certeza.