La NASA tiene problemas económicos. El enfásis en más pequeño, más rápido y más barato (smaller, faster, cheaper o SFC) para sus misiones espaciales también tiene sus desventajas. La NASA subcontrata demasiadas cosas y la predicción del coste total de cada misión es una tarea que raya lo imposible. En plena crisis financiera, el contribuyente se pregunta «si tan listos son, por qué piden cada vez más dinero para lo mismo.» Nos lo cuenta Georgee Musser en «Space Sticker Shock. The laws of physics are easy; it’s economics that vexes NASA,» Scientific American, January 2009 .
Un par de ejemplos. El Laboratorio Científico Marciano (Mars Science Laboratory, MSL), el vehículo motorizado que vemos en una reconstrucción 3D en la figura de la izquierda fue diseñado para que costara 650 M$ (millones de dólares). Con el petróleo por las nubes se estimó que costaría 1500 M$. En octubre pasado, se anunció que costará 2000 M$. El coste se ha triplicado. Otro ejemplo, el Telecosopio Espacial James Webb (que reemplazará al Hubble) fue diseñado para costar 1000 M$ y ahora se estima que acabará costando 4500 M$ (casi cinco veces más).
¿Por qué los ingenieros y científicos de la NASA son tan malos predictores del coste de sus misiones? Obviamente, hay graves problemas de gestión. ¿Cómo resolverlos? Cortar cabezas no parece la mejor solución, aunque Mike Griffin tiene los días contados al frente de la NASA. ¿Subvencionará el Congreso Americano nuevas gestas? La cancelación del SSC (Superconducting Super Collider) fue un claro ejemplo de que los grandes proyectos tienen que convencer tanto científica como económicamente. Alan Stern, uno de los directivos de la NASA, afirma que «soy muy pesimista en relación a una misión a Marte que permita tomar muestras que retornen a la Tierra,» única misión que resolverá todas las dudas sobre la posible vida pasada en Marte.
Años há, la NASA era «como Juan Palomo, yo me lo guiso, yo me lo como.» Todos los proyectos eran desarrollados en el marco de la propia NASA. Los costes eran «predecibles» (dentro de lo razonable) pero también eran altos. Todo cambió cuando se pasó al «bueno, bonito y barato.» Hay que subcontratar. Aparentemente no hay problema. Sin embargo, las subcontratas para ganar los concursos ofrecen «el oro y el moro,» y lo ofrecen barato, lo que en tecnología punta tiene altos riesgos y muchas veces no logran cumplirlo (¿lo habría logrado otro competidor?). Esta información incompleta y de poca calidad sobre la tecnología a desarrollar en las subcontratas conlleva que los directores de las misiones de la NASA tiendan a subestimar los costes. El director responde directamente del coste del diseño de una nave espacial, que ronda entre el 15% y el 20% del coste total y requiere del orden de un año y medio. Su «control» sobre el resto de los costes en el proyecto es muy «relativo».
¿Qué pasará con la NASA cuando el presidente electo Barack Obama alcance la presidencia de facto? Poco se sabe al respecto, pero las «malas lenguas» ven peligrar a la «cabeza» de la NASA, Mike Griffin. Parece que no hay «buen feeling» con el equipo del presidente electo. El programa de transbordadores espaciales será suprimido en 2010. Su sustituto, la nueva generación de cohetes Constellation (con graves problemas de presupuesto) no estarán listos antes de 2015 (en la figura de la derecha el Ares I). El Presidente Bush le pidió a Griffin que lograra que astronautas americanos vuelvan a la Luna para 2020, como primer paso al futuro viaje a Marte. Los Constellation son claves para ello. Sin embargo, los problemas de presupuesto y, seamos sinceros, también problemas técnicos están generando muchas dudas sobre los Constellation. El equipo de Obama se entrevistó con Griffin para preguntarle «qué pasaría si se cancelara el desarrollo del Ares I.» Griffin se «acojonó.» Solicitó a los principales contratistas (como Alliant Tech Systems) que le enviaran copia de toda la documentación que el equipo del presidente electo les demandara. La tensión se respira en el ambiente. En mi opinión, la cabeza de Griffin rodará pronto.
PS: «El Mars Science Laboratory, y la política del aterrizaje en Marte,» Publicado por Carlos en Diciembre 6, 2008 .
PS2: «La NASA y la ESA explorarán juntas Marte,» para llevar a cabo la misión Mars Sample Return, cuyo coste actual se estima entre los 6 y 8 M$, que es «el objetivo a largo plazo, pero hay pasos en el camino e intentaremos realizarlos juntos». Visto en Menéame. También sobre el tema «Odisea Cósmica,» también visto en Menéame.
PS3 (14 enero 2009): Más problemas para el MSL. Eric Hand, «Mars rover needs a date. NASA’s Mars Science Laboratory needs more money to reach the launch pad, and has less time,» Nature News, Published online 12 January 2009 .